Revisitando los clásicos: ¿Es posible recuperar el cine (tiempo) perdido?

Revisitando los clásicos: ¿Es posible recuperar el cine (tiempo) perdido?

La formación de todo cinéfilo nunca podrá ser completa. No es humanamente posible verlo todo, especialmente cuando la vida misma no se compone de largas horas-nalga en compañía de un reproductor de dvd y una televisión.

Pero aún así no dejo de darme la oportunidad de visitar los clásicos que por muchos años me eludieron. A veces han resultado gratos descubrimientos, y en otros me han servido para corroborar que el tiempo no es generoso con algunos filmes que en su tiempo fueron considerados novedosos, subversivos, o clásicos en automático.

Pienso en las películas del Santo que en su momento me parecieron espeluznantes y ahora que las recupero en dvd, me provocan un pensamiento que me taladra hasta el cerebelo “que pinches están y que pendejo estaba yo”. Hay cosas que nunca cambian.

En fin, como ha sido mucho lo que he visto y poco e tiempo para escribir, vamos a tener una especie de muchas películas en pocas palabras. Ojo que mis clásicos probablemente nada tengan que ver con los tuyos. Pero al fin de cuentas mis noches son mejores que tus días.

Déjalo Ser

Extraordinario documental sobre la decadencia (no creativa) del grupo de rock más importante de todos los tiempos: The Beatles. Si bien son de sobra conocidos algunas de las secuencias de la cinta (el toquín en los estudios de Apple, la sentida interpretación de The long and winding road y el multicitado pleito entre Harrison y McCartney, la cinta está llena de pequeños detalles que nos permiten apreciar el lado creativamente desmadroso y delirante de este grupo. Ejemplo de ello es la improvisación al piano de Ringo y Paul, un momento en el que los conflictos internos del grupo no importaban y sólo existía el puro goce de la música.

Indispensable para los fanáticos de The Beatles, para los estudioso de la música pop, y en general para los nostálgicos irredentos e irredimibles.

Aún no disponible en dvd, su sarnoso servidor tiene en sus manos una copia de muy buena calidad que estaría deseoso de compartir. Ya saben cuál es el procedimiento.

Alemania: año cero

Después de la guerra no siempre hay serpentinas de colores y besos al azar. Por lo general ni siquiera es posible hacer recuento de daños en el tiempo en el que ni siquiera se sabe si lo mejor fue sobrevivir.

Obra maestra del neorrealismo italiano, Alemania año cero nos presenta a un grupo de sobrevivientes alemanes que día a día deben enfrentar la angustia brutal de la falta de trabajo, de comida, de un maldito techo que no esté a punto de venirse abajo. Un mundo en el que el sexo es moneda de cambio para cigarrillos y alimentos. Un mundo colapsado en el que los niños son presa de pervertidos depredadores. Un mundo en el que la pérdida y la muerte son alivios.

If...

Si acaso pudiéramos, decir lo que pensamos, actuar bajo nuestros (débiles) principios, rebelarnos contra la brutalidad y al mismo tiempo desquitar la rabia acumulada por los años de humillaciones.

Extraordinario film de Lindsay Anderson en el que se nos presenta un internado para varones en el Reino Unido situado en las antípodas de aquella escuela light de Sociedad de los Poetas Muertos, y en el que lo importante no es leer poesía sino sobrevivir ante las constantes humillaciones, las golpizas y la tortura.

La violencia engendra violencia y eso se refleja en un final particularmente brutal en el que el único llamado a la cordura recibe como respuesta un balazo en la frente. Indispensable para todo aquel estudiante que se encuentre hasta la madre no solo de compañeros y docentes, sino de todo aquel que tenga algo que reclamarle a un sistema escolar podrido y corrupto.

Glen or Glenda?

Una cinta: malhecha, cursi, aburrida, incoherente, absurda, inepta, estridente y todo lo malo que se puedan imaginar pero al mismo tiempo… encantadora!

Y es que este primer filme del auteur por excelencia, Ed Wood, es el anuncio de todo lo que vendrá después en películas delirantes como La novia del mounstro y Plan 9 del espacio exterior, en las cuales se confirma que este señor carecía por completo del más mínimo asomo de talento, pero eso sí, le echaba hartas ganas a la filmada en lugar de estar chillando por ahí quejándose de que no hay financiamiento gubernamental para filmar.

Me parecen fascinantes los filmes de Ed Wood porque, entre toda su malhechura, tenían algo casi imposible de encontrar en el cine mexicano contemporáneo (de los 80’s pa’ acá): nunca fueron cintas pretenciosas, nunca pretendieron tirar netas o cambiar el mundo. Sólo eran el reflejo de un hombre desesperado por sobrevivir en el caníbal mundo del cine, y que a pesar de acumular fracaso tras fracaso nunca se rindió.

Como de costumbre, las mentadas de madre son bienvenidas.