Visitor Q: Así que creías que tu familia era extravagante…

2008/05/27

Visitor Q: Así que creías que tu familia era extravagante…

Dirección: Takashi Miike
Guión: Itaru Era
Fotografía: Hideo Yamamoto
Edición: Yasushi Yimamura
Intérpretes: Kenichi Endo, Shungiku Uchida, Kazushi Watanabe, Takuya Yamazaki,
Origen: Japon, 2000
Duración: 84 minutos
Aspecto en pantalla: 1.33:1
DVD: Tartan Video (por cierto, próxima a desaparecer)

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Me resulta imposible hacer una reseña relativamente convencional sobre esta desconcertante cinta (o video) de Takashi Miike, por lo que me limitaré a describir algunos de los eventos presentados:

El padre fornica con la hija prostituta.

El visitante come con frenesí y amablemente pide hielo.

El hijo golpea a la madre con un sacudidor de alfombras.

Los rufianes de la escuela obligan a defecar en público al hijo.

El padre fornica con un cadáver pero se queda “pegado”.

La esposa se prostituye.

La esposa se inyecta heroína.

El visitante sigue comiendo.

El reportero recibe un micrófono en el recto.

La hija filma y toma fotografías de sus clientes.

Los senos de la madre expulsan leche a chorros.

Padre y madre asesinan a los rufianes.

El padre combina masturbación y asfixia.

El visitante usa un paraguas para cubrirse de los chorros de leche.

Padre y madre serruchan cadáveres gozosamente.

El hijo decide estudiar recostado en un charco de leche.

La madre es feliz “despegando” con vinagre a su marido y el cadáver.

Y todos logran sus sueños y son felices para siempre.


Comedia de humor negro filmada en video con un presupuesto raquítico, Visitante Q representa una bofetada en el rostro del espectador pero no a manera de insulto. Una bofetada para despertar al que se encuentra adormecido por tanto cine basura y bodrios pseudointelectuales. Una bofetada para recordar que el mundo se mueve sin control más allá de morales, gobernadores, dioses y precauciones. Una bofetada para recordarte que todas las familias son disfuncionales (si también la mía y la tuya y la que algún día vas a tener, olvidar o mutilar).

Salvaje, cruel, violenta, incomprensible, obscena, necrofílica, sádica, maliciosa y… aunque no me lo crean, compasiva. En una palabra: indispensable!!!

Ahí les va el tráiler y una escena de armonía familiar (particularmente violentos, pueden herir susceptibilidades):

El corazón es traicionero por encima de todo: el infierno de ser hijo

2008/05/23

El corazón es traicionero por encima de todo: el infierno de ser hijo


Dirección: Asia Argento
Guión: Asia Argento basado en la obra “autobiográfica” de JT Leroy
Fotografía: Eric Alan Edwards
Edición: Jim Mol
Intérpretes: Asia Argento, Jimmy Bennett, Dylan y Cole Sprouse, Michael Pitt, Peter Fonda, Brian Warner, Winona Ryder
Origen: USA, 2004
Duración: 97 minutos.
Aspecto en pantalla: Full frame 1.33:1
DVD: Chafamax Videomax

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El corazón es engañoso y por sobre todo perverso. ¿Quién puede conocerlo?

Bien. Vamos a platicar un poco. Que esto quede muy claro. Yo soy tu madre. ¿De acuerdo? No te quería. Hice todo para deshacerme de ti. Si mi padre mu hubiera dejado te habría tirado por el inodoro.

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Jeremiah, un niño de siete años que ha vivido casi siempre en casa de padres adoptivos, es devuelto con Sarah, su desquiciada madre biológica que entre otras linduras lo hace probar drogas, beber cerveza y permite que una larga cadena de novios eventuales lo golpeen, violen y pulvericen física y psicológicamente, mientras trabaja como prostituta, y bailarina exótica. Al ser rescatado por su abuela, Jeremiah es hecho prisionero internado en el campo de una secta fundamentalista cristiana en la que el abuso es disfrazado de disciplina.

Brutal filme de Asia Argento (hija de Darío) en el que retoma el supuesto relato autobiográfico de JT Leroy para introducirnos en un mundo de pesadilla donde inocencia es borrada de tajo a fuerza de golpes, hambre y drogas, y ante la indiferencia de una madre que hubiera preferido tirarlo por la taza de baño como un pobre despojo humano.


Lo que más me impacto de esta cinta es la manera fría, casi naturalista de la directora para presentarnos su historia (que es la de demasiados niños). El único pero que le pongo es la presencia distractora de Winona Ryder (como una psicóloga salida del infierno), Peter Fonda y Brian Warner (mejor conocido como Marylin Manson), que si bien desarrollan sus papeles de manera por demás competente, la familiaridad de sus personas le restan credibilidad al asunto. Claro que si de realidad se trata, basta con ver el horror que se refleja en el espejo.

En México el dvd fue editado en una versión bastante pinche por Videomax, con el ridículo nombre “Corazones Heridos”. Pueden encontrarla en los botaderos de Walmart por la ridícula cantidad de 32 devaluados pesitos.

El arcón de los recuerdos: Some like it hot!

El arcón de los recuerdos: Some like it hot!

Les comparto este delicioso diálogo entre Jack Lemmon y Joe E. Brown en la cinta que en México conocimos con el nombre de “Una Eva y dos adanes”, título que me parece mucho más adecuado que el español, “Con faldas y a lo loco”, y es que ya saben cómo se las gastan en la madre patria con eso de los títulos.

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JOSEPHINE: Osgud, he de ser sincera contigo. Tu y yo no podemos casarnos

OSGUD: ¿Por qué no?

JOSEPHINE: Primero, porque no soy rubia natural.

OSGUD: No me importa.

JOSEPHINE: Y fumo, ¡fumo muchísimo!

OSGUD: Me da igual.

JOSEPHINE: Tengo un pasado horrible. Desde hace tres años estoy viviendo con un saxofonista.

OSGUD: Te lo perdono.

JOSEPHINE: Nunca podré tener hijos.

OSGUD: Los adoptaremos.

JOSEPHINE: No me comprendes, Osgud. ¡Soy un hombre!

OSGUD: Bueno, nadie es perfecto.


Revisitando los clásicos: ¿Es posible recuperar el cine (tiempo) perdido?

2008/05/07

Revisitando los clásicos: ¿Es posible recuperar el cine (tiempo) perdido?

La formación de todo cinéfilo nunca podrá ser completa. No es humanamente posible verlo todo, especialmente cuando la vida misma no se compone de largas horas-nalga en compañía de un reproductor de dvd y una televisión.

Pero aún así no dejo de darme la oportunidad de visitar los clásicos que por muchos años me eludieron. A veces han resultado gratos descubrimientos, y en otros me han servido para corroborar que el tiempo no es generoso con algunos filmes que en su tiempo fueron considerados novedosos, subversivos, o clásicos en automático.

Pienso en las películas del Santo que en su momento me parecieron espeluznantes y ahora que las recupero en dvd, me provocan un pensamiento que me taladra hasta el cerebelo “que pinches están y que pendejo estaba yo”. Hay cosas que nunca cambian.

En fin, como ha sido mucho lo que he visto y poco e tiempo para escribir, vamos a tener una especie de muchas películas en pocas palabras. Ojo que mis clásicos probablemente nada tengan que ver con los tuyos. Pero al fin de cuentas mis noches son mejores que tus días.

Déjalo Ser


Extraordinario documental sobre la decadencia (no creativa) del grupo de rock más importante de todos los tiempos: The Beatles. Si bien son de sobra conocidos algunas de las secuencias de la cinta (el toquín en los estudios de Apple, la sentida interpretación de The long and winding road y el multicitado pleito entre Harrison y McCartney, la cinta está llena de pequeños detalles que nos permiten apreciar el lado creativamente desmadroso y delirante de este grupo. Ejemplo de ello es la improvisación al piano de Ringo y Paul, un momento en el que los conflictos internos del grupo no importaban y sólo existía el puro goce de la música.

Indispensable para los fanáticos de The Beatles, para los estudioso de la música pop, y en general para los nostálgicos irredentos e irredimibles.

Aún no disponible en dvd, su sarnoso servidor tiene en sus manos una copia de muy buena calidad que estaría deseoso de compartir. Ya saben cuál es el procedimiento.


Alemania: año cero

Después de la guerra no siempre hay serpentinas de colores y besos al azar. Por lo general ni siquiera es posible hacer recuento de daños en el tiempo en el que ni siquiera se sabe si lo mejor fue sobrevivir.

Obra maestra del neorrealismo italiano, Alemania año cero nos presenta a un grupo de sobrevivientes alemanes que día a día deben enfrentar la angustia brutal de la falta de trabajo, de comida, de un maldito techo que no esté a punto de venirse abajo. Un mundo en el que el sexo es moneda de cambio para cigarrillos y alimentos. Un mundo colapsado en el que los niños son presa de pervertidos depredadores. Un mundo en el que la pérdida y la muerte son alivios.


If...

Si acaso pudiéramos, decir lo que pensamos, actuar bajo nuestros (débiles) principios, rebelarnos contra la brutalidad y al mismo tiempo desquitar la rabia acumulada por los años de humillaciones.

Extraordinario film de Lindsay Anderson en el que se nos presenta un internado para varones en el Reino Unido situado en las antípodas de aquella escuela light de Sociedad de los Poetas Muertos, y en el que lo importante no es leer poesía sino sobrevivir ante las constantes humillaciones, las golpizas y la tortura.

La violencia engendra violencia y eso se refleja en un final particularmente brutal en el que el único llamado a la cordura recibe como respuesta un balazo en la frente. Indispensable para todo aquel estudiante que se encuentre hasta la madre no solo de compañeros y docentes, sino de todo aquel que tenga algo que reclamarle a un sistema escolar podrido y corrupto.

Glen or Glenda?


Una cinta: malhecha, cursi, aburrida, incoherente, absurda, inepta, estridente y todo lo malo que se puedan imaginar pero al mismo tiempo… encantadora!

Y es que este primer filme del auteur por excelencia, Ed Wood, es el anuncio de todo lo que vendrá después en películas delirantes como La novia del mounstro y Plan 9 del espacio exterior, en las cuales se confirma que este señor carecía por completo del más mínimo asomo de talento, pero eso sí, le echaba hartas ganas a la filmada en lugar de estar chillando por ahí quejándose de que no hay financiamiento gubernamental para filmar.

Me parecen fascinantes los filmes de Ed Wood porque, entre toda su malhechura, tenían algo casi imposible de encontrar en el cine mexicano contemporáneo (de los 80’s pa’ acá): nunca fueron cintas pretenciosas, nunca pretendieron tirar netas o cambiar el mundo. Sólo eran el reflejo de un hombre desesperado por sobrevivir en el caníbal mundo del cine, y que a pesar de acumular fracaso tras fracaso nunca se rindió.

Como de costumbre, las mentadas de madre son bienvenidas.